El proyecto de construcción de una piscina olímpica en la
conocida como playa de La Herradura está siendo el causante de un serio
conflicto de tintes ecológicos entre una parte de la población y las
autoridades locales. Sergio Pizarro es el coquimbano que da voz al sector que
se niega a que continúen estas obras, mientras los representantes de este
ayuntamiento y la Asociación de Natación mantienen una posición de apoyo a esta
iniciativa que pretende que la ciudad de Coquimbo disfrute de una piscina
olímpica en el año 2014.
Y es que, según el sector que protesta, este territorio ya
está siendo gravemente agredido por la construcción de edificios residenciales
como para someterlo a un daño ecológico mayor. Las dunas de La Herradura son un
enclave único en el paisaje de esta zona de Chile, pero dadas las leyes del
Código Civil de esta nación, solo es playa la zona de arena que resulta mojada
durante los movimientos de las mareas, el resto no y, por tanto, puede ser de
titularidad privada.
Este amplio movimiento social de defensa de este terreno por
su alto contenido ecológico, que se ha organizado incluso entorno a una página
en internet, tiene enfrente los argumentos de las autoridades locales que
consideran que el dinero invertido en este proyecto, unos cinco mil millones de
pesos cedidos por el Gobierno Regional, ya no permiten que se traslade la
construcción de la piscina olímpica a otra zona. Algo que se apoya por la
Asociación de Natación, que además es uno de los gestores de este plan.