El cloro para desinfectar piscinas, cómo actúa y cúanto añadir

El cloro es un elemento químico que abunda en la naturaleza y que es esencial para muchas formas de vida.

Tratar con cloro el agua de nuestra piscina es, en el mantenimiento de las piscinas, el tratamiento químico que más se emplea.

Otras tareas de mantenimiento, sin incluir tratamiento químicos, consisten en recoger las hojas que acaban en el agua a causa del efecto del viento, o el filtrado del agua.

Cómo actúa el cloro en la desinfección de la piscina.

Del cloro que se añade al agua del piscina, una porción es empleada para acabar con los contaminantes que hay en el agua, y el resto es el cloro residual libre, que aguarda listo para eliminar los contaminantes que llegan a la piscina como consecuencia del viento o los propios bañistas, etc. 

Concretamente el cloro realiza su trabajo una vez que el filtro de la piscina termina de hacer el suyo, encargándose de eliminar los microorganismos que este no ha podido eliminar con su filtrado.

Si no añadimos cloro, o usamos otra técnica desinfectante, al agua de la piscina, poco tiempo durará el agua en condiciones aptas para el baño, ya que se convertirá en un hábitat perfecto para las algas provocando insalubres efectos así como estéticos, como es el caso del conocido problema del agua verde de las piscinas. 

Cuánto cloro hay que poner en la piscina

La cuestión es ¿Cuánto cloro aplicar en nuestra piscina y cada cuánto tiempo? Pero no hay un respuesta tipo para esta pregunta, sino que hay que tomar en cuenta distintos factores: cómo es el clima en el que está la piscina, qué la rodea que puede influir en su contaminación, o si llueve mucho o poco en la zona, evidentemente también si se trata de una piscina cubierta, cuántas personas van a usarla, cúanto se va a utilizar...

Siempre es mejor seguir las indicaciones de algún profesional para administrar este producto. Lo que hay que tener en cuenta es que para que el agua de la piscina este desinfectado hay que mantener un nivel de cloro residual libre de entre 0,5 y 2 ppm.

Podemos encontrar cloro para piscinas en el mercado de diversas formas Líquido, en pastillas o granulado. Lo aconsejable para el mantenimiento de nuestras piscinas es el cloro pastillas y el granulado granulado. 

Una vez administrado el cloro no termina el trabajo, hay que vigilar diariamente su estado, ya que puede variar en función de diversos factores, como el calor que haya hecho, la gente que ese ha bañado o si el viento ha arrastrado suciedad hasta la piscina. 

Para llevar a cabo esta medición tendremos que disponer de un analizador de agua,, instrumento que habitualmente nos permitirá medir lo niveles de cloro, bromo, ph y alcalinidad.